Son tal vez las calles solitarias y oscuras
o son las luces artificiales de madrugada
las que me hacen pensar que no hay luz
más fuerte que las que me acompañan
pues no creo que exista una mañana tranquila
estando sentado en esta banca
junto al alma de mis tristezas acumuladas.
No he podido hallar paz en esta ciudad
pues el tiempo viene con la muerte
y los días con preocupaciones
no hay paz en esta ciudad de promesas vacías
no hay silencios más que los de la madrugada
esta que ahora me congela los sueños
y que provoca que lloré el ser que soy
no tengo nada que pueda perder
ni un solo centavo en qué gastar
solo que me quedaré mirando
la vieja avenida que da para la plaza
sin nada
como el sentir que tengo hacia mi vida
como todas las noches en las que mi alma vaga perdida.